Como es de público conocimiento, cuando se desarrollaban las tareas habituales de clases del nivel primario y secundario del Almte. G. Brown, funcionarios policiales arribaron a la institución para comunicar que debían desalojar las instalaciones por una amenaza de bomba informada en la seccional policial.
Profesores y estudiantes regresaron a las aulas, luego de la tarea realizada por la división explosivos de la policía que finalizó con resultado negativo.
Lamentamos éste como cualquier otro ataque a la educación pública que de ningún modo puede ser interpretada como una travesura.
Más bien llamamos a la comunidad toda a reflexionar y a no festejar este tipo de acciones siniestras que evocan los momentos más terribles de la historia no sólo argentina sino mundial.
También solicitamos por este medio a las autoridades ministeriales y de seguridad que investiguen urgentemente el origen de estos actos deplorables.